¿Cuáles son los medicamentos que no consiguen acabar con el cáncer?

Compartir en:
fjrigjwwe9r1_articulos:cuerpo
Los avances que se han logrado en la investigación contra el cáncer han conseguido que la mortalidad asociada a estos tumores se haya recudido significativamente en las últimas décadas. Es por ello que la supervivencia a los cinco años de los pacientes con cáncer pasó de un 49% a un 68% en solo 40 años en Estados Unidos. 

Sin embargo, la cifra de decesos causados por los distintos tipos de tumores sigue siendo muy elevada. De hecho, en el presente 2016 y por primera vez, las enfermedades oncológicas serán la primera causa de muerte en nuestro país, por encima de incluso las cardiovasculares. 

Según un artículo publicado en la revista The BMJ, porque a pesar de la abrumadora inversión llevada a cabo en innovación, los nuevos fármacos contra el cáncer aprobados en los últimos 10 años tienen un efecto mínimo sobre la supervivencia de los adultos con cáncer.

"El hecho de tener que gastar una suma anual de seis cifras para prolongar la vida unas semanas o meses podría ser, simple y llanamente, inapropiado para muchos pacientes. Debemos adoptar unos criterios más estrictos para la aprobación de los fármacos y mejorar el proceso de consentimiento para, así, lograr tratamientos más éticos y reducir los costes del cáncer", comentó Peter Wise, del Hospital Charing Cross de Londres. 

El coste global de los fármacos para el tratamiento del cáncer en 2015 ascendió a cerca de 95.000 millones de euros. Unos fármacos, no cabe duda, que juegan y han jugado un papel crucial en la disminución de la mortalidad asociada a las enfermedades oncológicas.

"¿Qué porcentaje de esta mejora en la supervivencia del cáncer podemos atribuir a los nuevos fármacos? Debe haber otros factores que, muy probablemente, hayan tenido una mayor responsabilidad en esta mejora. La mayoría de los nuevos fármacos aprobados en la última década prolongan la vida de los pacientes en solo uno o dos meses", explicó el experto.

"La aprobación de fármacos con unos beneficios tan nimios sobre la supervivencia plantea cuestiones éticas, caso de si los pacientes son realmente conscientes de los limitados beneficios de los fármacos, de si los cocientes entre el coste y el beneficio están justificados, y de si los ensayos clínicos están realmente ofreciendo una información correcta", explicó el experto. 

El autor solicitó la atención sobre las limitaciones de los ensayos clínicos para testar los fármacos anticancerígenos, cuyos parámetros de evaluación, si bien establecidos para permitir una rápida aprobación del nuevo medicamento, no siempre son unos indicadores veraces de un beneficio en la supervivencia. Y además, "las respuestas marginales observadas en los ensayos clínicos quizás ni puedan aplicarse a la mayoría de pacientes tratados en la práctica clínica real".

"El bajo baremo para la aprobación de estos fármacos tan caros ignora el principio ético de justicia y equidad. Y es al promover un mejor tratamiento, pero marginal, de los tumores mal respondedores, se desvían recursos valiosos que podrían emplearse mejor en otras necesidades de salud, tanto dentro como fuera de la atención al cáncer", apuntó Peter Wise. 

"Lo primero que hay que hacer es elevar el umbral para la aprobación de los fármacos anticancerígenos, tanto los nuevos como los ya existentes, para lo que se debe emplear criterios más específicos sobre el riesgo-beneficio y el coste-beneficio", explicó el experto. 


- Ver en Hechos de HoyLas mujeres que padecen obesidad dan a luz a bebés más envejecidos
Compartir en: